Wednesday, June 20, 2018

Diablo, Deja ir a Mi Pueblo

Éxodo 10:3
Así que Moisés y Aarón fueron ante el faraón y le dijeron: ‘Esto dice el Señor, Dios de los hebreos: ‘¿Hasta cuándo te negarás a someterte a mí? Deja ir a mi pueblo para que me adore.”

Quería enviar esta valiosa información a muchos de ustedes que pueden ser de ascendencia hispana, conocen personas hispanas, o se preocupan por lo que está sucediendo a muchas familias que han sido puestas en cautiverio y con sus hijos separados de ellos. 1 Corintios 15:46 dice que primero viene lo natural entonces lo espiritual. Esto quiere decir que las manifestaciones naturales de las cosas que vemos, usualmente tienen un lado espiritual que Dios quiere mostrarnos o advertirnos.

Fui a una reunión el viernes pasado para los hispanos en mi comunidad, organizada por un grupo que quiere dar a conocer los recursos y programas disponibles para los hispanos y los capítulos en las diferentes ciudades que hacen que estas cosas estén disponibles, especialmente para aquellos quienes no tienen documentación legal para poder acudir a un médico, a un abogado, o buscar cualquier otro tipo de ayuda para ellos o sus familias.

En la reunión, la exponente que representaba al Departamento de Salud, dio algunas estadísticas acerca de la fortaleza de la comunidad hispana en la forma en que soportamos tiempos duros y largos, y vivimos vidas largas en su mayor parte, cómo somos rápidos para ayudarnos unos a otros y reunir nuestras finanzas y recursos para ayudar a los que están en necesidad, o cómo también celebramos en grande con nuestras fiestas de bloque e incluimos a todos.

En ese momento el Señor me habló y me recordó el estudio que hice durante varios años desde el año 2001 donde me pidió que investigara la raza judía que muchos hispanos tenemos y quien es Él como el Dios del pueblo judío. Yo me incluyo porque no sabía de esto en mi niñez, pero descubrí que vengo de un linaje judío e incluso aprendí acerca de la tribu a la que pertenezco en ambos lados de mi familia. Así, el Señor me recordó de las cosas no sólo mencionadas en la Biblia, sino en algunos libros de historia acerca de los puntos fuertes de la raza judía y por lo que hemos pasado durante varios siglos.

Si has leído mis enseñanzas de esta página de blog, has visto que he mencionado que debemos orar por revelación. Esto significa que necesitamos estudiar para mostrarnos aprobados por Dios. 2 Timoteo 2:15 dice, "Esfuérzate para poder presentarte delante de Dios y recibir su aprobación. Sé un buen obrero, alguien que no tiene de qué avergonzarse y que explica correctamente la palabra de verdad.”

Pero esto también es necesario para nuestros tiempos de oración. Cuando conocemos los hechos, la raíz de las circunstancias con las que estamos lidiando y hemos hecho nuestra tarea de averiguar por qué las cosas son como son y lo que significa eso en el ámbito espiritual, para saber cómo el enemigo está luchando contra nosotros. Entonces podemos venir ante el Señor y orar con valor, sabiendo lo que le estamos pidiendo que haga por nosotros y así también le demostramos que somos conscientes de su propósito para nuestras vidas y queremos asociarnos con Él para establecer en la tierra lo que está en su corazón para nosotros, su pueblo.

Este es el caso de lo que está sucediendo con las familias hispanas que han sido puestas en la cárcel listas para ser deportadas de vuelta a sus países nativos y sus hijos han sido separados de ellos. En primer lugar, permítanme darles los antecedentes de lo que descubrí en mis años de investigación no sólo para mí, sino para muchos hispanos en América Latina. Durante el tiempo en que Cristóbal Colón llegó a descubrir América en sus diferentes viajes patrocinados por el rey Fernando de Aragón y la Reina Isabel de Castilla, a esta pareja de monarcas se les pidió casi por la fuerza por parte de algunos clérigos que emitieran el Decreto de la Alhambra, un edicto contra el pueblo judío de esa tierra que eran alrededor de 200,000.

En este edicto, ellos habían exigido que el pueblo judío que vivía dentro de su jurisdicción dejara de practicar sus tradiciones y rituales judías para adorar a Dios y en su lugar se convirtieran al cristianismo. La falta de obediencia al edicto dio lugar a que la gente perdiera sus tierras, sus negocios, incluso su subsistencia y, en muchos casos, sus vidas. Había muchas maneras de obligar a la gente a cumplir con el edicto cuando se les encontró que no estaban cumpliendo con él. Entre esas formas se encontraba la tortura y muchos de ellos perdieron sus vidas y familiares. También, parte del castigo del espíritu del anticristo que operaba a través de estos gobernantes y sus asesores fue el exilio para muchos ellos. Esto es lo que se conoce como la Inquisición española.

Además, muchos de ellos terminaron viajando con Colón a las Américas porque fueron expulsados de la tierra española y fueron enviados como convictos para ayudar a descubrir la nueva tierra. Así que se establecieron en los diferentes lugares donde habían llegado en América. Luego ellos establecieron aldeas donde vivían y se mezclaban con los nativos y otros mestizos de ese lugar. Aquí es donde se sabe que muchos de nosotros tenemos ascendencia judía y ni siquiera lo sabemos. Por cierto, el edicto hecho por estos dos monarcas fue revocado por el Concilio Vaticano II el 16 de diciembre de 1968.

¿Por qué esto es importante? Porque quiero hacer un llamamiento a la gente hispana y latinoamericana para que aprendan quiénes son y de dónde vienen muchos de ellos. Esto es importante también porque hay muchos beneficios y derechos que tenemos como pueblo de Dios peculiar y Santa nación por nuestra ascendencia iniciada por Abrahán, a quien Dios le pidió que dejara su tierra, un lugar lleno de idolatría y se fuera a la tierra que Él le mostraría, que resultó ser la tierra de Canaán (por favor lea Génesis 12 y los siguientes capítulos). 

Luego, una vez que la nación judía y las 12 tribus fueron establecidas, experimentaron diferentes momentos como exiliados en otras tierras debido a su idolatría, que hizo que violaran su pacto con Dios para hacer de Él su único Dios. En otras palabras, esto era como un pacto matrimonial entre Dios y el pueblo judío para que Él fuera su Dios y estuviera siempre con ellos, y para que ellos fueran su pueblo peculiar y nación Santa (separados a Él para servirlo, adorarlo y asociarse con Él solamente y con ningún otro dios).  Éxodo 19:5-8 dice:

Ahora bien, si me obedecen y cumplen mi pacto, ustedes serán mi tesoro especial entre todas las naciones de la tierra; porque toda la tierra me pertenece.Ustedes serán mi reino de sacerdotes, mi nación santa’. Este es el mensaje que debes transmitir a los hijos de Israel’.

Entonces Moisés regresó del monte y llamó a los ancianos del pueblo y les comunicó todo lo que el Señor le había ordenado. Y todo el pueblo respondió a una voz: ‘Haremos todo lo que el Señor ha ordenado’. Entonces Moisés llevó al Señor la respuesta del pueblo.”

Por lo tanto, durante los tiempos del escriba Esra, la gente volvió de nuevo del cautiverio a Jerusalén y a Judá, para que todos volvieran a sus propias tierras. Esra 2:1 dice: “Esta es la lista de los desterrados judíos de las provincias que regresaron de su cautiverio. El rey Nabucodonosor los había desterrado a Babilonia, pero ahora regresaron a Jerusalén y a las otras ciudades de Judá donde vivían originalmente.”


Esto se debe a que hubo una obra de restauración que el rey Ciro había permitido comenzar para el pueblo judío, y también para la construcción del templo. Para ello, era necesario que la gente volviera a la tierra de sus ancestros para la recuperación de su herencia porque eran tiempos de recompensa como lo son ahora para el pueblo hispano.

Por lo tanto, he dado todos estos antecedentes para mostrar lo que está sucediendo en el espíritu para que usemos mejor postura en oración ante nuestro Dios a favor de estas familias hispanas porque con esta información podremos orar de acuerdo con la su voluntad, y no por nuestras propias ideas o agendas por falta de conocimiento (Oseas 4:6). También es importante que no usemos nuestras bocas para deshonrar o para expresar nuestra repulsión de lo que está sucediendo de una manera que no glorifica a Dios. Desafortunadamente, me he encontrado con algunos comentarios y argumentos que demuestran que las personas, aunque rechazan la manera en que se han hecho las cosas, todavía no saben lo suficiente para discutir con conocimiento pleno y comprensión de los tiempos en que estamos y de los caminos de Dios.

Así que quiero pedirle a mi gente, el pueblo hispano y Latinoamericano que busquen aprender quiénes son, que elijan conocer al Dios que los formó en el vientre de su madre y les dio un propósito para cumplir en esta tierra (Salmos 71:6; 139:13), y que también los ama (Juan 3:16) y tiene grandes planes para ellos por un futuro y no para perjudicarlos y para darles un final esperado que Él planeó desde los cimientos del mundo para ellos (Jeremías 29:11).

Es importante que vivamos de acuerdo con el propósito para el cual fuimos creados porque entonces viviremos con la gracia de Dios (su ayuda) para cumplirlo en esta tierra, y su favor estará sobre nosotros, Él peleará nuestras batallas y nos dará grandes victorias cuando nos asociamos con Él para establecer su Reino en la tierra. Para esto, Él también proveerá todas nuestras necesidades y nos ayudará a caminar en dominio en la tierra. Todo esto sucederá cuando le digamos que sí a Él pidiéndole a su hijo, Jesús quien murió en la Cruz por nuestros pecados y para reconciliarnos con nuestro Padre, que sea nuestro Señor y Rey Salvador. así que, a través de nuestra intimidad con Él, podremos conocer y vivir el destino que El planeo para nosotros.

Pero una cosa es que nosotros aceptemos lo que Jesús hizo por nosotros, y le digamos que sí a Él, y otra cosa es querer tener todas las cosas accesibles para nosotros por su Reino y entrar para poseerlas a través de nuestra relación con Dios donde somos hechos uno con Él como el pacto que los hebreos hicieron con Dios a través de Moisés en el Monte Sinaí. Por eso, necesitamos buscar primero su Reino y toda su justicia (Mateo 6:33 – en otras palabras, conocer los principios espirituales necesarios) y no hacer otras cosas que pensamos, pero que no son su voluntad para nosotros.

Además, hay un principio también muy importante al que prestar atención ya que ahora conocemos la ascendencia judía de muchos en la comunidad hispana. Romanos 2:8-11 dice: “pero derramará su ira y enojo sobre los que viven para sí mismos, los que se niegan a obedecer la verdad y, en cambio, viven entregados a la maldad. Habrá aflicción y angustia para todos los que siguen haciendo lo malo, para los judíos primero y también para los gentiles; 10 pero habrá gloria, honra y paz de parte de Dios para todos los que hacen lo bueno, para los judíos primero y también para los gentiles. 11 Pues Dios no muestra favoritismo.”

Esto significa que nuestra idolatría y el rechazo al Dios del pueblo judío porque Él nos creó para adorarle y servirle solamente a Él (Mateo 4:10) resultará en no poder disfrutar de las cosas que Él ha puesto a su disposición a medida que nos asociamos con Él. En cambio, aquellos que se entregan a la idolatría, prefiriendo ir a ver lo que el brujo o el santero o los ídolos hechos con sus manos tienen que decirles sobre su futuro y sus vidas o de sus tiempos de prueba más que aquel que los creó, verán como en su lugar se alejaron de las manos protectoras de Dios por seguir sus ídolos y pasan por grandes problemas.


Muchos practican la idolatría sólo porque siguen las tradiciones de sus culturas y de sus antepasados sin el conocimiento completo de por qué lo hacen. Pero ellos no saben que cada vez que eligen seguir a un dios falso, están alejándose de la vida de bendición y protección que Dios tiene para ellos. Pero cuando eligen caminar con Él y asociarse con Él para establecer su Reino en sus vidas y sus esferas de influencia, vivirán con dominio en la tierra. La idolatría también los hace perder su autoridad en Él y en su nombre. Lo que, es más, Dios es también un Dios celoso que no compartirá su gloria con los ídolos. Éxodo 34:12-14 dice:

12 “Ten mucho cuidado de no hacer tratados con los pueblos que viven en la tierra adonde te diriges. Si los haces, seguirás sus malos caminos y quedarás atrapado.13 En cambio, deberás destruir sus altares paganos, destrozar sus columnas sagradas y derribar los postes dedicados a la diosa Asera. 14 No adores a ningún otro dios, porque el Señor, cuyo nombre es Celoso, es Dios celoso de su relación contigo.”

Por lo tanto, ahora quiero pedirle que ustedes, que están leyendo este artículo, que ayuden en la lucha por la liberación y la restauración de las personas que han sido prisioneras. No voy a culpar al Presidente de los Estados Unidos porque, en cambio, elijo orar por él y pedirles que me acompañen en esta oración:

Dios Celestial y justo, venimos a ti humildemente a arrepentirnos por los pecados de nuestro pueblo y de nuestros líderes. Te pedimos que los ayudes a entender tus caminos para que podamos vivir una vida pacífica en toda piedad y reverencia en nuestra tierra y que nuestro Presidente pueda llegar al conocimiento de la verdad (1 Timoteo 2:1-4). No queremos aprovechar esta oportunidad para deshonrar al hombre puesto en su posición por ti (Romanos 13:1), por lo que te pedimos que su caminar sea lleno de sabiduría, conocimiento y comprensión de tus caminos y de tu voluntad para el pueblo hispano. También, que camine sabiendo discernir el bien y el mal para juzgar a tu pueblo con justicia, así como lo hizo el rey Salomón (1 Reyes 3:6-9).

Señor Dios, elegimos también perdonar a aquellos líderes en tiempos pasados que hicieron decretos contra nuestra raza judía antepasada que causó devastación a nuestras familias y provocó la separación y el exilio para muchos de ellos, así como la pérdida de su sustento. Nos arrepentimos por ellos y aplicamos la sangre de Jesús sobre esos pecados cometidos contra nosotros. También aplicamos el poder de resurrección dunamus de tu hijo Jesucristo a esas heridas para que podamos ser sanados y para que el enemigo nos libere y detenga su opresión sobre nosotros y nuestras familias y nuestras posesiones porque ha perdido su derecho legal de hacerlo.

Padre oramos para que los cautivos sean liberados, y que las familias puedan ser reunidas. Tenemos que recordar también que tu eres un Dios que trabaja en patrones, y si el caso es que tu estás provocando un movimiento de tu espíritu para ayudar a estas familias, incluso en su falta de conocimiento regresar a sus tierras nativas para recibir la herencia que tienes para ellos, entonces te pedimos que les des la sabiduría necesaria para seguir tu guía por tu espíritu y que pongas en sus vidas gente que les ayuden en su transición. Y para aquellos que van a permanecer en este país, que las puertas estén abiertas para que lo puedan hacer.

También reconocemos que hay un movimiento de tu espíritu que traerá a los jóvenes, incluso los milenarios a correr a ti y servirte de una manera radical, como la mujer en el pozo en Juan capítulo 4, porque estos son los tiempos de una gran manifestación de la cosecha que tú, en tu soberanía estás trayendo a la tierra y que se manifestará en gran medida a través de la juventud. Como recordamos que tu trabajas en patrones, también reconocemos que tú te mueves primero en nombre de los judíos, incluyendo los judíos hispanos, y luego con los grupos no judíos. Así que pedimos que aquellos que han provocado la corrección y la ira en sus vidas a través de su idolatría, que se arrepientan y busquen tener una relación sana contigo como su único Dios.

También queremos orar para que se hagan contribuciones para ayudarles (Romanos 15:25-27) ya sea para su transición fuera del país a su país de origen y que sus hijos y familias sean restaurados a ellos para que puedan obedecer el mandato de ser liberados para que puedan servirte y adorarte sólo a ti. Por esto, oramos para que aprendan a renovar el espíritu de su mente y a salir de la idolatría y las tradiciones impías.

Oramos esto porque, como dice Esther 8:11, se ha hecho un decreto para que se les permitas luchar por sus familias y sus posesiones y saquear a su enemigo, el diablo de todo lo que se robó de ellos por su falta de conocimiento. Esto sólo puede suceder cuando reciban el conocimiento y la comprensión de quién eres tu como su Dios y la autoridad que les has otorgado para luchar por lo que tu Reino les está dando como su herencia. Oramos para que ellos aprendan a luchar en unidad como tus hijos para que todos puedan ver una triunfante victoria en sus vidas.

Padre, he oído que le das una última advertencia al Faraón demoníaco que ha regido este sistema anticristo, para que deje ir a tu gente para que ellos puedan adorarte y servirte sólo a ti con sus familias. Nos rehusamos a dejar a nuestros hijos en manos del enemigo para que los use para servirle a él en vez de a ti. Así que tomamos autoridad sabiendo nuestro derecho como hijos tuyos y declarando que el enemigo nunca tendrá éxito en contra de nosotros por nuestra ascendencia judía y la ruina de ese sistema anticristo ha comenzado (Ester 6:13).

Declaramos que las obras de Satanás contra nosotros están destruidas, y todos los decretos demoníacos serán vetados por el poder superior para vetar que tiene la sangre de Jesucristo. También declaramos que todas las aguas demoníacas utilizadas para nutrir la obra del diablo contra el pueblo de Dios se secan inmediatamente, y las puertas de la prisión se abren repentinamente para nosotros y nuestras familias, para que nuestras vidas puedan ser restauradas en cada área y podamos cumplir tu propósito juntos. Gracias, Dios Todopoderoso, que te levantas de tu santa morada para hacer que tus enemigos se dispersen y se detenga el ciclo impío de persecución y opresión del enemigo en nuestras vidas. Oramos esto en el poderoso nombre de Jesús.

Sólo a Dios sea toda la gloria. ■

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Escrituras tomadas de la versión Nueva Traducción Viviente.

Friday, June 15, 2018

El Pecado – Eres lo que Comes 2

2 Timoteo 3:1-5
1 “Timoteo, es bueno que sepas que, en los últimos días, habrá tiempos muy difíciles. Pues la gente solo tendrá amor por sí misma y por su dinero. Serán fanfarrones y orgullosos, se burlarán de Dios, serán desobedientes a sus padres y malagradecidos. No considerarán nada sagrado. No amarán ni perdonarán; calumniarán a otros y no tendrán control propio. Serán crueles y odiarán lo que es bueno. Traicionarán a sus amigos, serán imprudentes, se llenarán de soberbia y amarán el placer en lugar de amar a Dios. Actuarán como religiosos pero rechazarán el único poder capaz de hacerlos obedientes a Dios. ¡Aléjate de esa clase de individuos!”

Estos son tiempos en los que el fuego de Dios ha sido enviado para exponer la suciedad y la escoria que detiene a su pueblo de caminar en el centro de su voluntad. Cuando este fuego arde, el objeto de ello es no huir de él sino permitirle consumir aquellas cosas que nos hacen lucir como el mundo que no lo conoce y así el oro (la esencia de lo que somos en Él y nuestro reflejo de Cristo) será revelado en nosotros después.

Lo triste del pasaje inicial es que no era sólo dirigido hacia el mundo exterior, sino para personas que se llamaban a sí mismas seguidores de Cristo, pero querían seguir siendo sus propios dioses y gobernantes de su mundo. Ellos querían tener el control de sus propios destinos y todavía poder reclamar las bendiciones de Dios y promesas a ellos. Había cosas que estaban sucediendo entre ellos: una pelea aquí, y el orgullo allá. blasfemias aquí y calumnias allá. La codicia aquí y los placeres mundanos y sensuales allá. Ellos se daban a estas cosas con facilidad y sin vergüenza. La corrección que se les dio no fue atendida y entonces quedaron quejándose de las luchas que atravesaban.

Pero no se dieron cuenta de que su mentalidad que condujo a su comportamiento abominable (Proverbios 6:16-19) les impidió entrar en el Reino como Dios quería guiarlos. Así como los hijos de Israel, su boca fue la primera cosa que les impediría entrar. Se quejaban constantemente y nunca estaban satisfechos con las cosas que Dios les hizo accesibles en el desierto de pruebas donde su fuego tenía la intención de eliminar las cosas que les impedian llegar a su tierra prometida. Se quejaron del maná que Dios usó para alimentarlos por la manera en que él eligió darles provisión. Números 11:1-6 nos dice,

1 “Poco después el pueblo comenzó a quejarse de las privaciones que enfrentaba, y el Señor oyó todo lo que decían. Entonces el enojo del Señor se encendió contra ellos y envió un fuego que ardió entre ellos y destruyó a algunos en las afueras del campamento. Así que el pueblo pidió ayuda a gritos a Moisés, y cuando él oró al Señor, el fuego se apagó. Después, ese lugar fue conocido como Taberá (que significa ‘lugar del fuego que arde»), porque el fuego del Señor ardió allí entre ellos.
Entonces la gentuza extranjera que viajaba con los israelitas comenzó a tener fuertes antojos por las cosas buenas de Egipto. Y el pueblo de Israel también comenzó a quejarse: ‘¡Oh, si tuviéramos un poco de carne! —exclamaban—. Cómo nos acordamos del pescado que comíamos gratis en Egipto y teníamos todos los pepinos, los melones, los puerros, las cebollas y los ajos que queríamos. ¡Pero ahora lo único que vemos es este maná! Hasta hemos perdido el apetito’”.

Ellos estaban tan centrados en querer los placeres que habían dejado en Egipto que se perdieron las lecciones que Dios quería que aprendieran a través del comer el maná. Deuteronomio 8:3, 16 nos ayuda a ver cuáles son las lecciones esenciales y claves que Dios quería mostrarle a ellos y siguen siendo esenciales para nosotros no sólo cuando estamos en tiempos de prueba, sino en nuestra vida cotidiana con el fin de eliminar cada rastro de contaminación del mundo. Dice,

Sí, te humilló permitiendo que pasaras hambre y luego alimentándote con maná, un alimento que ni tú ni tus antepasados conocían hasta ese momento. Lo hizo para enseñarte que la gente no vive solo de pan, sino que vivimos de cada palabra que sale de la boca del Señor.”

16 En el desierto, te alimentó con maná, un alimento desconocido para tus antepasados. Lo hizo para humillarte y para ponerte a prueba por tu propio bien.”
Lo que Dios esperaba de ellos era que le hablaran de las promesas que Él les había hecho y que siguieran recordándole hasta que las poseyeran, en lugar de quejarse de cada pequeña cosa que encontraban que no se adaptaba a sus ambiciones egoístas, por lo que las palabras de sus bocas los mantuvo fuera de la tierra que Dios les había prometido. La Biblia dice, y como se mencionó varias veces en diferentes enseñanzas de esta página de blog, que estamos llamados a ser santos porque Él es santo. Levítico 11:44-45 dice:

44 “Pues yo soy el Señor tu Dios. Debes consagrarte y ser santo, porque yo soy santo. Así que no te contamines al tocar cualquiera de estos animales pequeños que corren por el suelo. 45 Pues yo, el Señor, soy quien te sacó de la tierra de Egipto para ser tu Dios; por lo tanto, sé santo porque yo soy santo.”



Esto es importante de resaltar porque fuimos creados para ser consagrados a Él para que, a medida que demostramos nuestra dependencia de Él, podamos cumplir nuestros destinos. Y para eso necesitamos cada palabra que sale de su boca para guiarnos y ayudarnos a atravesar los valles y también cuando lleguemos a las montañas de nuestros llamados. Habíamos mencionado antes que la Biblia dice que aparte de Él, o cortados de nuestra unión con Él no podemos hacer nada (Juan 15:5).

Eso es porque Dios nos ve a través del propósito por el cual nos llamó y nos colocó en esta tierra. Así que cuando elegimos vivir nuestra vida separados de Él y sin cumplir o al menos sin prepararnos para cumplir nuestros llamados, nos encontramos con problemas, decepciones y limitaciones en nuestras vidas que no fuimos destinados a atravesar. Hemos dicho que hay dos razones por las que encontramos problemas y persecuciones del enemigo: uno es porque estamos en el centro de la voluntad de Dios y eso levanta la oposición del enemigo de nuestro llamado. Pero la otra razón es, por lo contrario — cuando no somos dependientes de Dios, y conscientes de seguir los principios de su Reino, y en lugar vivimos como el mundo y nadie puede ver la diferencia entre los perdidos y nosotros, entonces nos encontramos con las consecuencias de cosas que escogemos hacer aparte de la voluntad de Dios.

La mentalidad de los israelitas de la primera generación de los que salieron de Egipto también les impidió alcanzar su destino prometido porque pensaban más en lo que no tenían, en lugar de tratar de renovar sus mentes y aprovechar todas las oportunidades para aprender lo que les ayudaría a estar preparados para cuando ese lugar y tiempo llegaran para alcanzar sus destinos. Esta gente quería las promesas sin la preparación. Querían las bendiciones sin el trabajo. Ellos sólo querían recibir, pero no tener a Dios como su Señor y Amo. En otras palabras, las cosas tenían que hacerse en sus términos, no en los términos de Dios, pero sabemos que eso nunca funciona.

Ellos eran demasiado débiles en las cosas del espíritu para concentrar sus esfuerzos en la lucha contra la buena batalla de la fe y también ayudar a los demás a alcanzar sus destinos. Habían salido de Egipto, pero Egipto todavía estaba en ellos. No podían verse a sí mismos aparte de los caminos de Egipto y, por lo tanto, no podían ver que para alcanzar sus promesas debían ser conscientes de seguir el liderazgo de Dios por medio los líderes que fueron designados para ellos. Ellos pensaban que eran iguales a sus líderes y no necesitaban que nadie los guiara para llegar a la tierra de Canaán porque lo importante no era tanto el salir de Egipto, sino la manera en que necesitaban salir de Egipto. Así que la tercera cosa que les impidió llegar a sus promesas fue que se rebelaron contra Dios y contra sus líderes, en lugar de enfrentarse contra su verdadero enemigo: el diablo. Éxodo 16:1-7 revela,

1 “Después, toda la comunidad de Israel partió de Elim y viajó al desierto de Sin, ubicado entre Elim y el monte Sinaí. Llegaron el día quince del segundo mes, un mes después de salir de la tierra de Egipto. Allí también toda la comunidad de Israel se quejó de Moisés y Aarón.
‘¡Si tan solo el Señor nos hubiera matado en Egipto! —protestaban—. Allá nos sentábamos junto a las ollas llenas de carne y comíamos todo el pan que se nos antojaba; pero ahora tú nos has traído a este desierto para matarnos de hambre’.
Entonces el Señor le dijo a Moisés: ‘Mira, haré llover alimento del cielo para ustedes. Cada día la gente podrá salir a recoger todo el alimento necesario para ese día. Con esto los pondré a prueba para ver si siguen o no mis instrucciones. El sexto día juntarán el alimento y cuando preparen la comida habrá el doble de lo normal’.
Entonces Moisés y Aarón dijeron a todos los israelitas: ‘Antes de anochecer, sabrán que fue el Señor quien los sacó de la tierra de Egipto.Por la mañana, verán la gloria del Señor, porque él oyó las quejas de ustedes, que son contra él y no contra nosotros. ¿Qué hemos hecho para que ustedes se quejen de nosotros?’”.

Su constante insatisfacción los convirtió en personas enojadas, murmuradoras, amargadas, y resentidas de lo que no tenían, y por lo mucho que pensaban en haber dejado Egipto por seguir los caminos de Dios. Estaban demasiado centrados en pelear y señalar los dedos a otros y no en aprender la manera correcta de salir de Egipto no sólo físicamente, sino también en su mentalidad que no les iba a ser útil en su nueva tierra. Por eso, lo que necesitaban hacer era aprender a aferrarse a Dios y a cada palabra que salía de su boca que les daría las estrategias necesarias para alcanzar su destino. Además, necesitaban ser determinantes en su dependencia de Él, y respetar reverentemente su autoridad sobre ellos y las personas que Él había puesto como sus líderes porque ellos podían oír de Dios cómo dirigir al pueblo.

Es por eso que Dios nos está llamando a evitar los mismos errores cometidos por los israelitas que no alcanzaron entrar a su tierra prometida. Por esta razón, necesitamos hacer caso de su palabra y seguir oyendo cada palabra que nos ayudará a conocer y aplicar las estrategias necesarias para alcanzar nuestra tierra de destino de una manera que nos haga libres de la mentalidad del mundo, y hablando la palabra de Dios y recordándole de sus promesas a nosotros y no murmurando ni quejándonos o mostrándole que no estamos satisfechos con las cosas que hace por nosotros y en nosotros a medida que crecemos en nuestro caminar con Él y en nuestra jornada hacia nuestro destino.


La falta de sumisión a Dios y a las figuras de autoridad que Él ha establecido en nuestras vidas también, vaya destacar nuevamente, nos impiden entrar porque Dios es un Dios de honor y aquellos que lo honran a Él y a las figuras de autoridad que los ayudarán a llegar a su tierra prometida podrán ver cómo su honor es recompensado. 1 Samuel 2:30 nos dice una vez más:

30 “Por lo tanto, el Señor, Dios de Israel, dice: prometí que los de tu rama de la tribu de Levi me servirían siempre como sacerdotes. Sin embargo, honraré a los que me honran y despreciaré a los que me menosprecian.”

De la misma manera, Romanos 13:1-6 habla sobre la importancia de respetar y someterse no sólo a las autoridades civiles en nuestras comunidades, sino a todas las figuras de autoridad puestas por Dios para ayudarnos en nuestros tiempos de entrenamiento y para llevarnos a las promesas que Dios nos ha dado. Dice,

1 Toda persona debe someterse a las autoridades de gobierno, pues toda autoridad proviene de Dios, y los que ocupan puestos de autoridad están allí colocados por Dios. Por lo tanto, cualquiera que se rebele contra la autoridad se rebela contra lo que Dios ha instituido, y será castigado. Pues las autoridades no infunden temor a los que hacen lo que está bien, sino en los que hacen lo que está mal. ¿Quieres vivir sin temor a las autoridades? Haz lo correcto, y ellas te honrarán. Las autoridades están al servicio de Dios para tu bien; pero si estás haciendo algo malo, por supuesto que deberías tener miedo, porque ellas tienen poder para castigarte. Están al servicio de Dios para cumplir el propósito específico de castigar a los que hacen lo malo. Por eso tienes que someterte a ellas, no solo para evitar el castigo, sino para mantener tu conciencia limpia.                                                                           
Por esas mismas razones, también paguen sus impuestos, pues los funcionarios de gobierno necesitan cobrar su sueldo. Ellos sirven a Dios con lo que hacen.
Además, otra manera de referirnos a nosotros como personas santas (apartadas como personas que se enfocan en aprender los caminos del Reino y sus principios a través de la comunión constante con Dios y la obediencia a Él) es que somos llamados personas especiales o exclusivas de Dios. 1 Pedro 2:9 explica:

Pero ustedes no son así porque son un pueblo elegido. Son sacerdotes del Rey, una nación santa, posesión exclusiva de Dios. Por eso pueden mostrar a otros la bondad de Dios, pues él los ha llamado a salir de la oscuridad y entrar en su luz maravillosa.”

Sólo hay una manera de vivir como gente especial y exclusiva de Dios en este mundo y separarse de el y eso es renovando nuestra mente de las cosas contaminadas de este mundo para que podamos destacar las cosas puras de las impías y lo santo de lo profano. Romanos 12:1-2 dice:

1 “Por lo tanto, amados hermanos, les ruego que entreguen su cuerpo a Dios por todo lo que él ha hecho a favor de ustedes. Que sea un sacrificio vivo y santo, la clase de sacrificio que a él le agrada. Esa es la verdadera forma de adorarlo. No imiten las conductas ni las costumbres de este mundo, más bien dejen que Dios los transforme en personas nuevas al cambiarles la manera de pensar. Entonces aprenderán a conocer la voluntad de Dios para ustedes, la cual es buena, agradable y perfecta.”
1 Tesalonicenses 5:23-24 también nos dice: 23 Ahora, que el Dios de paz los haga santos en todos los aspectos, y que todo su espíritu, alma y cuerpo se mantenga sin culpa hasta que nuestro Señor Jesucristo vuelva. 24 Dios hará que esto suceda, porque aquel que los llama es fiel.”

Así que seamos conscientes de lo que agrada a nuestro Señor y Dios y no nos conformemos con el patrón de este mundo que nos impide alcanzar nuestro destino en Él. A Él solo sea toda la gloria.

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Versículos bíblicos tomados de la Versión Nueva Traducción Viviente. 

Wednesday, June 6, 2018

El Pecado – Eres lo que comes 1

Génesis 4:7
Si haces lo correcto, siempre te aceptaré con agrado, pero si haces lo malo, el pecado está listo para atacarte como un león. ¡No te dejes dominar por él!’” TLA
El camino de la rectitud que lleva a la santidad es uno que conlleva trabajo, determinación y visión para perseguirlo y mientras viajamos a través de él, es bueno advertir que se hace más estrecho y empinado. No muchos permanecen en él porque tenemos que soportar mucho tiempo para poder seguir su curso, pero al final, trae grandes recompensas. Mateo 7:13-14 dice:

13 Entren por la puerta angosta. Porque la puerta y el camino que llevan a la perdición son anchos y espaciosos, y muchos entran por ellos; 14 pero la puerta y el camino que llevan a la vida son angostos y difíciles, y pocos los encuentran.” DHH

En este camino hay una elección constante entre seguir los caminos de Dios y abandonar las cosas de este mundo que están bajo el gobierno del príncipe del poder del aire (Efesios 2:2). Es por eso que muchos son llamados, pero pocos son elegidos para continuar en él (Mateo 20:16; 22:14). Se necesita sacrificio y un precio que pagar para permanecer en este camino que muchos no están dispuestos a pagar, por lo que permanecen en el pecado.

Muchos realmente aman al Señor y quieren seguir sus caminos, sin embargo, las cosas que consumen en su vida diaria hacen que ellos se descarrilen y se alejen del camino de la justicia y la santidad. No estoy hablando sólo de comida. Vemos en el pasaje inicial que el pecado llamaba a Caín hasta que pudo acercarse a su puerta y entrar. Como dice la escritura, debemos aprender a dominarlo antes de que nos domine. ¿Pero cómo podemos lograr dominar el pecado? Alimentándonos con las cosas que nos exponen a la rectitud y la santidad (que nos distingue de los caminos del mundo) y con la obediencia a todo mandato de Dios.

El pecado que dominó a Caín se convirtió en un pensamiento que el comenzó a entretener, luego se convirtió en una visión que quería ser cumplida, contaminó su corazón con ira, celos y envidia hasta que se convirtió en odio hacia su hermano. Él vio las cosas que su hermano hizo como mejor y más grandes que lo que él era capaz de lograr porque estaba contaminado con el espíritu Anticristo que se alimentaba de su complejo de inseguridad e inferioridad. Su pensamiento asesino se convirtió en un plan hasta que encontró la oportunidad de manifestar lo que lo consumía.

Así es como el pecado se convierte en acción en nuestras vidas. Entra por las puertas de nuestros ojos por las cosas que vemos en la televisión, en el cine o en las revistas. También por las cosas que oímos en la radio o por las bocas de otros que nos rodean, la música que elegimos escuchar con las palabras y las actitudes que permitimos que entren por nuestra puerta del oído. O por las personas que permitimos en nuestras vidas, las malas compañías que nos atraen a ver, escuchar, o ir a lugares para hacer lo que pervierte y atraviesa nuestros corazones hasta que nos volvemos duros y entumecidos a lo que es correcto. 

Cuanto más hacemos esto, más caminamos por el camino ancho, amplio y fácil que lleva a la muerte y llama a lo malo bueno y a lo bueno malo (Isaías 5:22). Cada vez que comprometemos nuestros valores morales y oímos un lenguaje burdo que deshonra y avergüenza y trae terror y enojo y deseos sexuales que son ilegales porque no estamos casados con la persona, nos corta en el interior de nosotros hasta que nos transforma en la imagen y semejanza de aquello que permitimos continuamente entrar.

Algunos se comprometen por la soledad y permiten que las personas equivocadas que podrían sonar y parecer tener buenas intenciones para con ellos, en realidad viven vidas que están lejos de la voluntad de Dios y se acercan e influyan en ellos que les permiten su entrada. Otros lo hacen por miedo a no ser apreciados por sus compañeros, temen el ridículo y la exposición como alguien que no es lo suficientemente bueno como para ser contado como amigo(a) o camarada, otros lo hacen para encubrir lo que les hace daño y pretender que tienen lo que se necesita para sobresalir incluso con los métodos erróneos y el lugar equivocado para ellos, la gente equivocada, y las circunstancias equivocadas que podrían atraparlos a la destrucción.

Muchos pueden haber empezado a querer hacer lo correcto, amar a Dios y desear seguir sus caminos hasta que estimaron que el precio que se les pedía pagar era demasiado alto. Por lo tanto, se volvieron reacios a sacrificar más de lo que habían negociado para ir tras la perla de gran precio que es el Reino y su justicia. Mateo 13:45-46 muestra el nivel de profundidad, de dedicación, y determinación que debemos tener hacia las cosas del Reino de Dios para poder permanecer en el estrecho camino que lleva a la vida,


45 “Sucede también con el reino de los cielos como con un comerciante que andaba buscando perlas finas; 46 cuando encontró una de mucho valor, fue y vendió todo lo que tenía, y compró esa perla.” DHH

Así que para que nos cuenten entre los justos, humildes, arrepentidos, fieles, y con un corazón dispuesto a perseguir y obedecer lo que está en el corazón de Dios, necesitamos hacer lo contrario de lo que el mundo hace. Como se mencionó anteriormente, la santidad requiere que caminemos separados de las cosas de este mundo. Sí, estamos en este mundo, pero no somos de él. Juan 15:16 dice:

Ustedes no me escogieron a mí, sino que yo los he escogido a ustedes y les he encargado que vayan y den mucho fruto, y que ese fruto permanezca. Así el Padre les dará todo lo que le pidan en mi nombre.” DHH

Venimos de otro Reino, un Reino cuya fundación son la justicia, la verdad, el amor, bondad, y la misericordia (Salmo 89:14; 97:2). Esto significa que nuestras vidas deben ser consumidas con los caminos de este Reino y para eso debemos familiarizarnos con su gobernante y Rey. Su nombre es Jesús, el que hace que nuestro yugo sea fácil y nuestra carga sea liviana (Mateo 11:30), ya que Él toma cada carga que no somos capaces de llevar por nosotros mismos, porque debemos elegir darle las cargas a Él con el fin de poder caminar en este estrecho camino. El Salmo 37:5 dice:

Pon tu vida en las manos del Señor;
confía en él, y él vendrá en tu ayuda
.” DHH

Nos mantenemos en el camino de la justicia y la santidad al permitir que su palabra sea profundamente arraigada en nosotros. Esto lleva tiempo porque debemos convertirnos en un buen suelo para que su palabra que nos muestra los caminos del Reino pueda germinar y producir un buen fruto en nosotros que sale de nosotros a través de las cosas que pensamos los cuales producen las palabras que pronunciamos y las cosas que hacemos Proverbios 23:7a dice, 7 “pues como piensa dentro de sí, así es…”

Lucas 6:45 también dice: “El hombre bueno, del buen tesoro de su corazón saca lo que es bueno; y el hombre malo, del mal tesoro saca lo que es malo; porque de la abundancia del corazón habla su boca.” LBLA

La Biblia dice que somos conocidos como hijos de Dios por nuestro fruto. Este es el fruto de la rectitud y la santidad que nos ayuda a no comprometernos con los caminos de este mundo. Mateo 12:33 nos dice:

 “’Si el árbol es bueno, dará buen fruto; si el árbol es malo, dará mal fruto; pues el árbol se conoce por su fruto.” DHH

Para esto, tenemos la necesidad de pasar tiempo con nuestro Creador y Señor porque Él es justo y Santo, y si queremos caminar como personas hechas a la imagen y semejanza de nuestro Padre, a través de su Hijo por su Espíritu Santo (Génesis 1:27) , la intimidad con El en la oración, leyendo su palabra, alabando y glorificándolo, meditando en su palabra, ayunando, y buscando escuchar las palabras que salen de su boca.  

El aprender a escuchar su voz y poder diferenciarla de la voz del acusador enemigo y hacerla nuestra principal forma de comunicación con Él, debe convertirse en nuestro estilo de vida porque aparte de Él no podemos hacer nada. 
Juan 15:5 dice:
Yo soy la vid, y ustedes son las ramas. El que permanece unido a mí, y yo unido a él, da mucho fruto; pues sin mí no pueden ustedes hacer nada.” DHH

Esto también ayuda a que el suelo de nuestro corazón esté libre de las cosas contaminadas de este mundo, tales y como todas las formas de mentiras del enemigo, cada daño y herida en nuestra alma que produce ideas oscuras y legalistas y conceptos en el filtro de nuestra mente a través de fortalezas y mentalidades que son opuestas a Él y a su palabra, toda doctrina engañosa y cosa abominable que produce la maldad la cual conduce al mal comportamiento ante la vista de Dios. Estas maneras abominables se encuentran en Proverbios 6:16-19 que dice:

16 “Hay seis cosas, y hasta siete,
que el Señor aborrece por completo:
17 los ojos altaneros,
la lengua mentirosa,
las manos que asesinan a gente inocente,
18 la mente que elabora planes perversos,
los pies que corren ansiosos al mal,
19 el testigo falso y mentiroso,
y el que provoca peleas entre hermanos
.” DHH

Muchas de estas cosas vienen porque nos preocupamos de querer controlar y manipular nuestros caminos en la vida, buscando alguna forma de piedad con algunas escrituras que estén de acuerdo con nuestro pensamiento, pero cuando encontramos una palabra del Señor que no está de acuerdo con nuestra mentalidad, entonces la abandonamos y preferimos los caminos del mundo que ahogan la palabra de Dios de nuestros corazones, y en cambio, nos llevan al camino ancho y amplio que al final lleva a la muerte. Lucas 8:12-15 explica la diferencia entre en un corazón que es una buena o una mala tierra diciendo:


y la parte que cayó por el camino representa a los que oyen el mensaje, pero viene el diablo y se lo quita del corazón, para que no crean y se salven. 13 La semilla que cayó entre las piedras representa a los que oyen el mensaje y lo reciben con gusto, pero no tienen suficiente raíz; creen por algún tiempo, pero a la hora de la prueba fallan. 14 La semilla que cayó entre espinos representa a los que escuchan, pero poco a poco se dejan ahogar por las preocupaciones, las riquezas y los placeres de la vida, de modo que no llegan a dar fruto. 15 Pero la semilla que cayó en buena tierra, son las personas que con corazón bueno y dispuesto escuchan y hacen caso del mensaje y, permaneciendo firmes, dan una buena cosecha.” DHH

Lo que, es más, para que nos convirtamos en un buen suelo, necesitamos permitir que la comida adecuada sea lo que consumimos. La comida adecuada para nuestro tipo de suelo (hijos de Dios y ciudadanos del cielo). Es decir, que al igual que no todas las plantas pueden crecer en el mismo tipo de suelo y clima, parte del país o medio ambiente, necesitamos llegar a ser el tipo adecuado de suelo que producirá un buen cultivo que es saludable y se multiplica para alimentar a muchos. Es por eso que conseguir el abono y compost de la palabra de Dios, la oración, y todo lo demás mencionado arriba, todas estas cosas nos ayudarán a crecer en el conocimiento de Dios y de los caminos de su reino.

También necesitamos reunirnos con personas de mentalidad similar a la nuestra. Personas que van en la misma dirección que nosotros, también con personas que tienen el tipo de testimonios que queremos para nuestras vidas y que tienen la sabiduría y la comprensión de la palabra de Dios para ayudarnos a alcanzar nuestros destinos y alcanzar el tipo de éxito en Dios que buscamos. También tenemos que cerrar la puerta a las cosas mundanas que pueden querer arrastrarnos a través de nuestra puerta del ojo, nuestra puerta del oído, nuestra puerta de la boca, nuestra puerta de las manos, nuestra puerta de la nariz, y nuestra puerta de los órganos sexuales.

Hay un montón de cosas de este mundo que alimentan el miedo a través de su programación, incluso en formas sutiles. También alimentan la oscuridad y los caminos al ocultismo que es idolatría y toda falsa forma de adoración que apartan a las personas de Dios. Además, las cosas del mundo alimentan el egoísmo, el orgullo, la soberbia y el odio y a subir presionando y empujando o durmiendo (con pereza o teniendo sexo), o mintiendo y usando astucia para alcanzar nuestro camino al éxito. El fin de todo esto es la destrucción. Proverbios 16:16-18 aclara para nosotros,

16 Más vale adquirir sabiduría que oro;
más vale entendimiento que plata.
17 La norma de los justos es apartarse del mal;
cuidar la propia conducta es cuidarse uno mismo.
18 Tras el orgullo viene el fracaso;
tras la altanería, la caída.”
DHH

Todas estas cosas deben ser purgadas y podadas de nosotros si queremos todo lo que Dios tiene para nosotros. Cuanto más nos mostramos fieles a él, más Él nos puede confiar. Así que vamos a creer la palabra de Dios y seguir su camino de justicia, rectitud y santidad que lleva a una vida de abundancia al máximo, hasta que se desborda (Juan 10:10) y hacer lo que dice Santiago 1:21,
“Así pues, despójense ustedes de toda impureza y de la maldad que tanto abunda, y acepten humildemente el mensaje que ha sido sembrado; pues ese mensaje tiene poder para salvarlos.” DHH

Solo Dios sea toda la gloria.

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Friday, June 1, 2018

Cuando el Enemigo Quiere Tamizarte

Lucas 22:31-32
31 Dijo también el Señor:
—Simón, Simón, mira que Satanás los ha pedido a ustedes para sacudirlos como si fueran trigo; 32 pero yo he rogado por ti, para que no te falte la fe. Y tú, cuando te hayas vuelto a mí, ayuda a tus hermanos a permanecer firmes.” DHH

Hay momentos en que pasamos por circunstancias que nos dejan preguntándonos ¿Qué está sucediendo y por qué? Esto es probablemente como se sintió Pedro cuando vio todo lo que le rodeaba desmoronándose. El antecedente de la situación es que Jesús estaba enseñando a sus discípulos sobre la verdadera forma de hacer liderazgo y servicio después de la cena de Pascua. Durante la cena, Él también había anunciado que uno de ellos lo traicionaría, y con esto se refería a Judas Iscariote.

Los discípulos empezaron a discutir entre ellos acerca de quién estaba tratando de traicionarlo de entre ellos, pero Jesús usó la oportunidad para hacerle saber a Pedro que Satanás mismo estaba buscando tamizarlo. Esto significa que el enemigo estaba pidiendo poner a Pedro en juicio. Pedro se dedicó a caminar y servir a Jesús como discípulo y había dejado todo atrás, su familia y su carrera para seguirlo. Pero nunca se le ocurrió que había algunos antecedentes de su pasado que el enemigo iba a usar en su contra, tal vez en un momento en que podría haber sido elegido para una promoción en el espíritu.

Para explicar más, esto es lo que sucede a veces cuando el Reino nos ha elegido para una promoción, pero el enemigo viene delante del Señor para acusarnos y decirle a Dios por qué no debemos recibir la manifestación de esta promoción o bendición que estamos esperando del Señor. El enemigo hace eso porque ve que podemos tener pecados que no hemos confesado ni hemos buscado la forma de dejar de cometerlos y se han convertido en obstáculos para recibir las bendiciones de Dios para nosotros.

Así que lo que se manifiesta en su lugar es la acusación del diablo a través de personas que están heridas y contaminadas con el espíritu del mundo y no disciernen que lo que necesitamos es tiempo con nuestro Señor para buscar la sanación de nuestras heridas y la confesión de nuestros pecados que Dios nos revela. Mateo 26:69-74 dice:

69 Mientras Pedro estaba sentado afuera, en el patio, se le acercó una criada y le dijo: ‘También tú estabas con Jesús el galileo.’ 70 Pero él lo negó delante de todos, y dijo: ‘No sé de qué hablas.’ 71 Y se fue a la puerta. Pero otra criada lo vio, y dijo a los que estaban allí: ‘También éste estaba con Jesús el nazareno.’ 72 Pero él lo negó otra vez, y hasta juró: ‘No conozco a ese hombre.’ 73 Un poco después, los que estaban por allí se acercaron a Pedro y le dijeron: ‘Sin lugar a dudas, tú también eres uno de ellos, porque hasta tu manera de hablar te delata.’ 74 Entonces él comenzó a maldecir, y a jurar: ‘No conozco a ese hombre.’ Y enseguida cantó el gallo. “RVC

Jesús le había advertido a Pedro que él lo negaría tres veces (Marcos 14:30) y aunque Pedro le había asegurado que eso nunca sucedería, el miedo a morir, después de ver a su Maestro arrestado y condenado a muerte, se apoderó de él y su boca pronunció palabras que no quería realmente decir, pero fue en su naturaleza sin arrepentimiento que mentiría para proteger su propia carne. El pasaje dice que Pedro negó el conocer a Jesús tres veces. Esto está diciendo también que Pedro mentía por hábito y esto fue considerado su injusticia o falta de rectitud con Dios. Apocalipsis 22:14-15 explica el posible argumento del enemigo contra Pedro por mentir,


14 Bienaventurados los que lavan sus ropas, para tener derecho al árbol de la vida y para entrar por las puertas en la ciudad. 15 Pero afuera se quedarán los pervertidos, los hechiceros, los que han caído en la inmoralidad sexual, los homicidas, los idólatras, y todo aquel que ama y practica la mentira.” RVC

El enemigo sabía que Dios quería llevar a Pedro a obtener otros niveles de poder y autoridad en su ascenso espiritual, y por eso el Señor permitió su temporada en el desierto porque él tenía que superar esas tendencias de decir mentiras para salvar su propia carne por temor. Lo mismo sucede con nosotros y cuando nos encontramos siendo calumniados o acusados de algo sea cierto o no, la manera correcta de manejar la situación es que nos dirijamos a nuestro Señor y le preguntemos de qué es lo que el enemigo nos está acusando en lugar de tomar represalias contra la gente que están siendo utilizados por el enemigo. Efesios 6:12 nos dice por qué,

La batalla que libramos no es contra gente de carne y hueso, sino contra principados y potestades, contra los que gobiernan las tinieblas de este mundo, ¡contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes!” RVC

Esa es una de las razones por las que nos envían a pasar momentos en el desierto de pruebas. En este lugar podemos enfrentarnos con las cosas que nos impiden ser creyentes efectivos o que necesitan ser podados de nosotros porque no nos ayudan a crecer en los caminos y en las cosas en las que Dios quiere hacernos fuertes.

Para dar un ejemplo, recuerdo que cuando tenía seis años tuve una experiencia en la que vi a mi papá respondiendo de manera incorrecta a una situación y rechazó a alguien para favorecer a la persona equivocada. Él estaba demostrando una debilidad que tenía en el área de relaciones que causó en mi un miedo al rechazo desde ese momento. Yo no estaba consciente de que este miedo permaneció conmigo durante muchos años de mi vida adulta. Ni siquiera podía reconocer cual era la razón por la que estaba teniendo problemas con algunas relaciones en mi vida que significaban mucho para mí.

Entonces el Señor me dio una promesa a través de una profecía que involucraba el área de las relaciones. La promesa sonaba muy bien cuando la recibí, pero lo que vi fue de total opuesto a lo que me prometieron. Comencé a recibir acusaciones, calumnias de la gente, chismes sobre mí, y el rechazo, y aunque el pecado era generacional, es decir, yo no había cometido ningún pecado en esa área, pero era el miedo que estaba profundamente arraigado en mí lo que me hizo pasar por un periodo de juicio en el desierto.

Allí pude ver lo que estaba causando el miedo y cómo entró en mi porque finalmente estaba sola con mi Dios queriendo conocer su perspectiva sobre mi situación y pude recibir las revelaciones de las verdades que me liberaron (Juan 8:36). También me alegro de haber podido ver a mi papá crecer más fuerte en el área de las relaciones y cómo él aprendió a responder de acuerdo a la voluntad de Dios para él y para la gente a su alrededor. Así que mi papá venció en esa área, pero todavía yo necesitaba completar mi tiempo en el desierto de pruebas que aseguraría que sería liberada del miedo al rechazo y aprendí a responder de la manera correcta cuando esas situaciones llegaban.

Esta vez en el desierto también me ayudó a alcanzar el nivel de autoridad y unción donde el enemigo no podía usar sus acusaciones o el miedo al rechazo en mi contra porque fuí liberada por completo y ya no estaba en cautiverio con él. Isaías 10:27 nos explica que Dios nos ayuda a ser liberados del yugo de esclavitud del enemigo. Dice,


En ese día, el Señor acabará con la servidumbre de su pueblo.
    Romperá el yugo de la esclavitud
    y se lo quitará de los hombros.”
NTV

Esto también le pasó a Job. En Job 1 vemos que él tuvo una buena vida y confiaba en Dios. Había un muro de protección de Dios a su alrededor y todo lo que tenía. Pero llegó el momento en que Satanás pidió que lo tamizaran o lo pusieran en juicio porque pensaba que, si Job perdía todo, él abandonaría a Dios y lo maldeciría a su cara. Esto significa que Job también tenía una promoción espiritual, pero Dios quería asegurarse de que el fuera fortalecido en las áreas donde era débil para que no perdiera sus bendiciones tiempo después de recibirlos y al final, él pudo recibir una doble porción de herencia. Los versículos 6-12 nos dicen:

Un día los miembros de la corte celestial llegaron para presentarse delante del Señor, y el Acusador, Satanás, vino con ellos. El Señor le preguntó a Satanás:
—¿De dónde vienes?
Satanás contestó al Señor:
—He estado recorriendo la tierra, observando todo lo que ocurre.
Entonces el Señor preguntó a Satanás:
—¿Te has fijado en mi siervo Job? Es el mejor hombre en toda la tierra; es un hombre intachable y de absoluta integridad. Tiene temor de Dios y se mantiene apartado del mal.
Satanás le respondió al Señor:
—Sí, pero Job tiene una buena razón para temer a Dios: 10 siempre has puesto un muro de protección alrededor de él, de su casa y de sus propiedades. Has hecho prosperar todo lo que hace. ¡Mira lo rico que es! 11 Así que extiende tu mano y quítale todo lo que tiene, ¡ten por seguro que te maldecirá en tu propia cara!
12 —Muy bien, puedes probarlo —dijo el Señor a Satanás—. Haz lo que quieras con todo lo que posee, pero no le hagas ningún daño físico.
Entonces Satanás salió de la presencia del Señor.” NTV

A medida que leemos el libro entero, veremos que Job también fue acusado de personas que se pensaban ser sus amigos. Podemos ver que estos hombres sabían ciertas cosas acerca de Dios y los caminos del Reino, pero todavía se quedaron cortos de entender lo que realmente estaba sucediéndole a Job, y por qué perdió su familia, salud, riquezas y buena reputación como líder en su región.
Job pasó por un momento muy difícil que duró más de lo que él hubiera preferido. Pero al final, fue encontrado fiel a Dios y contento de haber recibido las revelaciones que le ayudaron a vencer durante su tiempo en el desierto. Job 42:1-3 nos revela el descubrimiento de Job de que algo estaba obstruyendo su comprensión de los caminos de Dios, y le impedía ver las cosas con la perspectiva correcta. Pero sus ojos estaban finalmente abiertos y él pudo ver de la manera en que Dios veía las circunstancias en su vida para que pudiera lidiar con ellas correctamente. Dice,

1 “Entonces Job respondió al Señor:
‘Sé que todo lo puedes,
    y que nadie puede detenerte.
Tú preguntaste: ‘¿Quién es este que pone en duda mi sabiduría con tanta ignorancia?’.
    Soy yo y hablaba de cosas sobre las que no sabía nada,
    cosas demasiado maravillosas para mí.’”
NTV

Lo que, es más, Job era un hombre compasivo antes de su juicio. Esto fue probado en la manera que él hizo sacrificios a Dios en nombre de sus hijos que estaban quizás descarriados o incluso rechazaban a Dios. Él quería ver a cada hijo pródigo en su familia regresar al Señor, y eso se convirtió en una fuerza mayor para él después del juicio. Para entonces, y como se mencionó en otras enseñanzas de este blog, él estaba dispuesto a perdonar y orar por los que lo habían agraviado. La mano de Dios era evidente en su vida una vez más, y recibió una doble porción de todo lo que tenía antes y también volvió a ser prominente en la tierra para la gloria de Dios.


Jesús, por otro lado, pasó por un tiempo de pruebas y juicio en el desierto después de que fue bautizado en el río Jordán por su primo Juan el Bautista. Allí, tuvo un encuentro con el Padre quien lo reconoció como su Hijo. Esto era una señal de que había recibido una promoción en el espíritu. Así que, justo después de este encuentro de promoción, fue enviado al desierto de las pruebas donde venció al enemigo justo antes de entrar en el Ministerio (Leer Mateo capítulos 3-4).

Sin embargo, después de sólo unos pocos años de Ministerio, Jesús fue envia
do a morir en la Cruz por la humanidad. Él también fue tamizado o puesto a prueba. Pero la diferencia entre la forma en que Jesús respondió a su temporada de pruebas y la de Pedro y Job fue que Pedro y Job reaccionaron con temor, pero Jesús respondió con fe ya que él sabía que era inocente y que era la voluntad del Padre que él pasara por esa prueba. Esto era necesario porque le daba el nivel de poder y autoridad y la unción necesaria para vencer al enemigo y resucitar con una poderosa victoria como Hijo de hombre. Lucas 22:15-22 nos revela esto,

15 “Jesús dijo: ‘He tenido muchos deseos de comer esta Pascua con ustedes antes de que comiencen mis sufrimientos. 16 Pues ahora les digo que no volveré a comerla hasta que su significado se cumpla en el reino de Dios’.
17 Luego tomó en sus manos una copa de vino y le dio gracias a Dios por ella. Entonces dijo: ‘Tomen esto y repártanlo entre ustedes. 18 Pues no volveré a beber vino hasta que venga el reino de Dios’.
19 Tomó un poco de pan y dio gracias a Dios por él. Luego lo partió en trozos, lo dio a sus discípulos y dijo: ‘Esto es mi cuerpo, el cual es entregado por ustedes. Hagan esto en memoria de mí’.
20 Después de la cena, tomó en sus manos otra copa de vino y dijo: ‘Esta copa es el nuevo pacto entre Dios y su pueblo, un acuerdo confirmado con mi sangre, la cual es derramada como sacrificio por ustedes.
21 ‘Pero aquí en esta mesa, sentado entre nosotros como un amigo, está el hombre que me traicionará. 22 Pues está establecido que el Hijo del Hombre tiene que morir. ¡Pero qué aflicción le espera a aquel que lo traiciona!’. NTV

Jesús fue acusado falsamente y traicionado, pero cuando estaba siendo crucificado, Lucas 23:34 nos dice, "Jesús dijo: ‘Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen’ …’"  Podemos ver que Jesús no salió del juicio, sino que se enfrentó a él sabiendo que era inocente, pero que tenía que cumplirse lo que se prometía en las Escrituras que Él tomaría los pecados del mundo sobre sí mismo, para que pudiéramos tener la salvación y la vida eterna y participar de la nueva alianza de la gracia.

Este es un gran ejemplo para nosotros de cómo debemos confrontar esas cosas que el enemigo encuentra en nosotros y por las que nos acusa ante el Padre para exigir que no recibamos sus promesas. Por lo tanto, a medida que nos encontramos en esos tiempos de prueba, debemos correr a los brazos de nuestro Dios amoroso y viviente, que está más que ansioso por revelarnos lo que el enemigo encuentra en nosotros para que ese pecado pueda ser clavado a la Cruz a través de nuestro arrepentimiento y confesiones a Él y a otros como Él nos indica, según Colosenses 2:14 que dice:

 Él anuló el acta con los cargos que había contra nosotros y la eliminó clavándola en la cruz.” NTV

Santiago 5:16 también nos hace saber que después de confesar nuestras faltas o pecados, y buscar la sanación de nuestras vidas en el área confesada y la restauración de nuestra rectitud con Dios, podemos estar seguros de que nuestras oraciones darán en el blanco y podemos recibir las respuestas que estamos buscando.  Dice:

Confiésense los pecados unos a otros y oren los unos por los otros, para que sean sanados. La oración ferviente de una persona justa tiene mucho poder y da resultados maravillosos.” NTV

Así que, ahora por favor únanse a mí en esta oración. Padre celestial y amoroso, venimos a ti dispuestos y en pos de tu justicia en nuestras vidas. Queremos ser restaurados a un caminar de rectitud contigo y pedirte que nos ayudes a superar las cosas por las que el enemigo nos acusa, de acuerdo con 2 Crónicas 7:14-15 que dice que si nosotros, tu pueblo, quienes somos llamados por tu nombre, nos humillamos ante ti, oramos, buscamos, anhelamos, y requerimos de tu rostro y nos devolvemos de nuestros caminos malvados, entonces oirás desde el cielo, perdonarás nuestros pecados, y sanarás nuestra tierra. Y ahora tus ojos estarán abiertos y tus oídos atentos a las oraciones ofrecidas en este lugar mientras clamamos y pedimos que nos reveles lo que el enemigo está usando contra nosotros para obstruirnos de vivir vidas victoriosas que te dan gloria y verdadera evidencia de que tu mano está sobre nosotros. Queremos alejarnos de todo pecado, y ser liberados de la esclavitud por tu mano poderosa que nos levanta de la fosa del miedo y la desesperación. Pedimos esto en el nombre que está sobre cada nombre. El poderoso nombre de Jesús. Amén.
Sólo a Dios sea toda la gloria.

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