Friday, March 21, 2014

Enseñanza Acerca de los Diezmos y las Ofrendas 1


Tuve la oportunidad de predicar este mensaje a través de una invitación para predicar/enseñar sobre el diezmo. De casualidad yo había tomado tres años para estudiar a cerca de este tema y encontré estas revelaciones que son raras en el cuerpo de Cristo. El mal uso de los diezmos y las ofrendas ha causado que muchos perezcan en su fidelidad a la iglesia y en su caminar con Dios debido a la falta de conocimiento y comprensión de la palabra de Dios (Oseas 4:6).

Deuteronomio 12:4-7, 11-13, 21 (NTV) 4 »No adores al Señor tu Dios de la manera en que esos pueblos paganos rinden culto a sus dioses. 5 Más bien, busca al Señor tu Dios en el lugar de adoración que él mismo elegirá entre todas las tribus, el lugar donde su nombre será honrado. 6 Allí llevarás tus ofrendas quemadas, tus sacrificios, tus diezmos, tus ofrendas sagradas, las ofrendas para cumplir tus juramentos, tus ofrendas voluntarias y las ofrendas de las primeras crías de tus manadas y rebaños. 7 Allí, en la presencia del Señor tu Dios, comerás hasta quedar satisfecho junto con tus familias, y te alegrarás por todo lo que hayas logrado gracias a la bendición del Señor tu Dios.
11 deberás llevar todo lo que yo te ordeno —tus ofrendas quemadas, sacrificios, diezmos, ofrendas sagradas y ofrendas para cumplir tus juramentos— al lugar de adoración designado, el lugar que el Señor tu Dios elija para que su nombre sea honrado.
12 »Celebra allí, en presencia del Señor tu Dios, con tus hijos e hijas y todos tus sirvientes. Y acuérdate de incluir a los levitas que vivan en tus ciudades, porque ellos no van a recibir ninguna asignación de tierra como las demás tribus. 13 Asegúrate de no sacrificar tus ofrendas quemadas donde se te ocurra.
21 Podría ser que el lugar de adoración designado —el lugar que el Señor tu Dios elija para que su nombre sea honrado— quede muy lejos de tu hogar. De ser así, podrás matar cualquier animal que el Señor te haya dado, tanto del ganado como ovejas o cabras, y comer su carne sin impedimento en la ciudad donde vives, tal como te ordené.

1. Es importante señalar que antes de que podamos hablar sobre el diezmo y las ofrendas, necesitamos saber que importa mucho donde damos el diezmo y nuestras ofrendas, primicias y todas las ofrendas que prometemos o pactamos dar al Señor. La escritura dice en el versículo 5 que es el Señor quien elige donde nos congregamos para ser alimentados espiritualmente y formar parte de una familia de creyentes. Estas cosas que acabo de mencionar debemos hacer en el lugar que Dios elige para que vayamos a la iglesia.

No podemos elegir este lugar por nosotros mismos. No por conveniencia, o porque por ejemplo, conocemos el Pastor o cualquier otra persona que sea miembro de una congregación en particular. Tampoco podemos elegir una iglesia simplemente porque puede ser el lugar más cercano a nuestra casa porque no queremos tener que luchar contra el tráfico para llegar a los servicios o la misa. No se puede elegir por presunción o porque el lugar suena y parece prestigioso y queremos ser vistos con lo que algunos suelen llamar "el grupo correcto".

No, Dios sabe donde recibiremos el alimento espiritual, capacitación y desarrollo para cumplir con nuestros llamados porque los dirigentes de la casa son ungidos y capacitados para reproducirse en nosotros para que podamos hacer hazañas mayores que ellos porque la unción que ellos derraman se multiplica en nosotros porque estamos siendo levantados como sus discipulos.

2. El versículo 6 dice que a ese lugar traigamos nuestras ofrendas, sacrificios y diezmos así como ofrendas especiales que hemos prometido dar al Señor y las primicias. Permítanme explicar por qué este es el orden en que las cosas se enumeran en esta escritura porque la iglesia lo ha hecho al revés. El verso primero menciona las ofrendas. La razón es porque las ofrendas deben ser designadas para cuidar de las necesidades de la casa. Con eso me refiero a los gastos de la luz, el agua, administración y necesidades de la oficina, para comprar bancas, mantenimiento, ampliaciones, etc.

3. Luego se menciona el diezmo. La escritura ya explicó que el diezmo es una décima parte de lo que ganamos (el grueso no el neto). Pero antes de continuar en esta explicación, déjenme saltar hasta el versículo 12 que dice: "Y acuérdate de incluir a los levitas que vivan en tus ciudades, porque ellos no van a recibir ninguna asignación de tierra como las demás tribus.". Pero ¿Quiénes son los Levitas?

Efesios 4:11-13 NTV dice,
11 Ahora bien, Cristo dio los siguientes dones a la iglesia: los apóstoles, los profetas, los evangelistas, y los pastores y maestros. 12 Ellos tienen la responsabilidad de preparar al pueblo de Dios para que lleve a cabo la obra de Dios y edifique la iglesia, es decir, el cuerpo de Cristo. 13 Ese proceso continuará hasta que todos alcancemos tal unidad en nuestra fe y conocimiento del Hijo de Dios que seamos maduros en el Señor, es decir, hasta que lleguemos a la plena y completa medida de Cristo.
Estas cinco oficinas son los levitas que la escritura dice que no tendrán ninguna herencia, porque Dios es su herencia. Deuteronomio 33:10 describe la manera en que esto trabaja,
Ellos enseñan tus ordenanzas a Jacob
y dan tus instrucciones a Israel.
Ofrecen incienso delante de ti
y presentan ofrendas quemadas enteras sobre el altar. NTV


Esta escritura dice que los Levitas, tambien llamados el Ministerio Quintuple, están llamados a pasar tiempo delante del Señor en la oración, recibiendo revelaciones frescas para dar a los demás miembros del Ministerio Quintuple y a la congregación comida fresca y llena de nutrientes y así ayudar a los santos a perfeccionarse en el trabajo de servicio a Dios en sus esferas de influencia. Necesitamos todos que los cinco miembros del Ministerio Quintuple estén presentes para enseñar, instruir y alimentar a la gente porque como se ha visto en el cuerpo de Cristo, muchas veces la gente no esta bien alimentada. Esto sucede debido a la condición incompleta del Ministerio Quintuple en los púlpitos a través de la mayor parte del planeta. El pueblo de Dios sólo ha tenido una algunas partes de los miembros para darles cada uno, una parte del corazón de Dios, pero no todos los miembros del Ministerio Quintuple han estado presentes.

Por ejemplo, si una casa es fuerte en lo profético y lo pastoral, pero no en el evangelismo, o la unción apostólica y enseñanza de los maestros, tenemos entonces gente propensa a la búsqueda de nuevas palabras proféticas todo el tiempo, pero renuentes a evangelizar o demasiado débiles para participar en las guerras espirituales. Estas son las cinco piezas del corazón de Dios que Él quiere dar a su pueblo. Por lo tanto, es esencial que estén presentes en un Ministerio de iglesia para que la gente tenga los cinco cursos de alimentos que los ayudarán a ser cristianos fuertes. El diablo conoce la desnutrición del pueblo de Dios y sabe cómo atacarlos en las áreas donde ellos están más débiles debido a la falta de exposición a los pedazos del corazón de Dios que no estan recibibiendo como nutrición espiritual para que reciban una dieta espiritul balanceada.

Esa es la razón por la qué estos cinco miembros reciben el diezmo dividido en cinco partes iguales, así que no tienen que preocuparse de sus necesidades personales y pueden dedicar ese tiempo a pasar con el Señor cocinando nuevas recetas espirituales para asi alimentar a sus discipulos con alimentos frescos y nutritivos en oración, el ayuno, lectura de la palabra, alabanza y adoración, etc., no con comida de temporadas anteriores ni materiales que se han hecho obsoletos y decadentes que dejan a muchos con mucha más hambre que cuando entraron a la Iglesia. Por eso dice Malaquías 3:6-12 en la versión Nueva Traducción Viviente,

6 »Yo soy el Señor y no cambio. Por eso ustedes, descendientes de Jacob, aún no han sido destruidos. 7 Desde los días de sus antepasados, han despreciado mis decretos y los han desobedecido. Ahora, vuelvan a mí y yo volveré a ustedes, dice el Señor de los Ejércitos Celestiales.
»Pero ustedes preguntan: “¿Cómo podemos volver cuando nunca nos fuimos?”.
8 »¿Debería el pueblo estafar a Dios? ¡Sin embargo, ustedes me han estafado!
»Pero ustedes preguntan: “¿Qué quieres decir? ¿Cuándo te hemos estafado?”.
»Me han robado los diezmos y ofrendas que me corresponden. 9 Ustedes están bajo maldición porque toda la nación me ha estado estafando. 10 Traigan todos los diezmos al depósito del templo, para que haya suficiente comida en mi casa. Si lo hacen —dice el Señor de los Ejércitos Celestiales— les abriré las ventanas de los cielos. ¡Derramaré una bendición tan grande que no tendrán suficiente espacio para guardarla! ¡Inténtenlo! ¡Pónganme a prueba!
11 »Sus cosechas serán abundantes porque las protegeré de insectos y enfermedades. Las uvas no caerán de las vides antes de madurar —dice el Señor de los Ejércitos Celestiales—. 12 Entonces todas las naciones los llamarán benditos, porque su tierra será un deleite, dice el Señor de los Ejércitos Celestiales.
  1. El versículo 7 de Deuteronomio 12 está de acuerdo con las escrituras de Malaquías. Eso me dice que así son las ventanas de los cielos abiertas, para que recibamos bendiciones de tal manera que no habrá suficiente espacio para recibirlas y el Señor de los ejércitos peleará nuestras batallas y cuida de nuestras bendiciones. Él lo hace Para que estemos bien nutridos y aprendamos a usar el manto de un evangelista, o el de un maestro, o el manto profético y de un pastor que extiende la misericordia y la compasión a otros, y también para aprender a participar en la guerra espiritual dirigidos por el Espíritu Santo en nuestras esferas de influencia porque nos hemos convertido en cristianos maduros que estamos bien alimentados y fuertes en todas las áreas del Ministerio Quintuple.

  2. No ir a la iglesia asignada por Dios o permanecer en la congregación de la que Él ha ordenado que nos apartemos es el primer paso para robar y estafar con diezmos y ofrendas a Dios. Esto es porque la persona que hace eso está robando al ungido de Dios llamado para alimentarlo como parte de su rebaño y tampoco se esta bien alineado con la voluntad de Dios para ellos y sus líderes elegidos de Dios y para hacerlos discípulos y ayudarlos a crecer en sabiduría y estatura espiritual y así ser capaces de cumplir con sus llamados en el poder y la gloria de Dios. Más en la próxima enseñanza. A Él sea toda la gloria. •

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