Plantados para Crecer y Florecer 4

Salmo 92:14-15 (NBLH) Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy

¹⁴ Aun en la vejez darán fruto;
Estarán vigorosos y muy verdes,
¹⁵ Para anunciar cuán recto es el Señor;
El es mi Roca, y que en El no hay injusticia.

El rasgo del carácter de un cristiano (creyente y seguidor de Jesucristo) es de nuestro amor y adoración a Dios y de amor por nuestro prójimo como nos amamos nosotros mismos. Para poder llegar a demostrar este rasgo de carácter, Dios permite circunstancias en nuestras vidas diseñadas para remover la forma de pensar y comportamiento que son contrarios a lo que dice la Biblia es la forma en que debemos ver y se referirnos a él — el único Dios que es y nos ayuda a eliminar la forma de pensamiento y comportamiento que nos ha hundido más profundo en pecado. A través de la lectura de la palabra en comunión con él, nos conduce al arrepentimiento y a la renovación de nuestra mente (Jeremías 23:29), así como a identificar ídolos que hemos exaltado (otros llamados dioses) que aprendimos a adorar a través de nuestras culturas, y mientras nosotros, en nuestra hambre de poder, posición, logros de riqueza o aclamación hemos recurrido de una forma contraria a la voluntad de Dios. Jeremías 9:23-25 dice:

²³ Así dice el Señor:

“No se gloríe el sabio de su sabiduría,
Ni se gloríe el poderoso de su poder,
Ni el rico se gloríe de su riqueza;
²⁴ Pero si alguien se gloría, gloríese de esto:
De que Me entiende y Me conoce,
Pues Yo soy el Señor que hago misericordia,
Derecho y justicia en la tierra,
Porque en estas cosas Me complazco,” declara el Señor.

²⁵ “Ciertamente vienen días,” declara el Señor, “en que castigaré a todo el que esté circuncidado sólo en la carne:

Ser circuncidados en espíritu significa deshacerse de los deseos de nuestra carne que nos mantienen en el pecado para que nosotros podamos obedecer lo que dice la palabra de Dios. Este es un compromiso de vida que nos lleva a diferentes niveles de sabiduría, conocimiento y comprensión de Dios y de su Reino como una persona va a la escuela primero en el nivel elemental, el nivel junior, la escuela secundaria, Colegio, etc. La forma de relacionarnos y tratamos a otras personas, involucran a otras partes de esta circuncisión (demostramos amor, respeto y honra a nuestros padres, hermanos, hijos, vecinos, jefes, etc.? o los oprimimos con nuestras palabras y comportamiento).

 También existe la circuncisión espiritual de la manera en que manejamos nuestras finanzas y recursos que Dios pone a nuestra disposición, (lo usamos para avanzar el Reino de Dios a través de diezmos y ofrendas, para ayudar a los pobres y para ser utilizado de acuerdo con su voluntad o los utilizamos para nuestras propias ambiciones egoístas y acaparamiento que se hacen obstáculo para que otros puedan ver a Dios a través de lo que podemos pero descuidamos hacer).

Ademas la forma en que manejamos nuestros cuerpos es circuncidada, por lo que podemos aprender buenos hábitos que implican los alimentos que comemos (que deben ser nutritivos para mantener nuestros cuerpos sanos y energéticos) con el ejercicio. Las relaciones sexuales (que sólo debe hacerse con nuestros cónyuges) es otra área que es circuncidada al igual que otras formas en las tratamos nuestros cuerpos como con el uso de las drogas y alcohol, o la mutilación a si mismo, etc., que son contrarias a la palabra de Dios acerca de amarnos a nosotros mismos. Sin amarlo a él y buscar su presencia esto no es fácil de hacer porque la unción que recibimos al estar en su presencia nos ayuda y nos libera a amarnos como él nos ama.

La forma en que usamos nuestra lengua también recibe la circuncisión (cómo hablamos de otros — es a través de chismes, calumnias, etc., o oramos por otros y preguntamos cómo podemos ayudar cuando vemos a un hermano o hermana caer o parecer que está cayendo, pero Dios está tomando a esa persona través de una estación de purificación y fundación más profunda en la rectitud y la santidad que Dios requiere de nosotros y hace que el proceso no parecer muy atractivo). También cómo vemos y hablamos de nosotros mismos: lo hacemos a través de los ojos de inferioridad e inseguridad, o según la palabra de Dios que nos muestra como él nos ve y nos ayuda a hablar de nuestras circunstancias de una manera que nos hace estar de acuerdo con lo que Dios nos hablo en su palabra concerniendo esa circunstancia (utilizamos palabras inactivas o de maldición o la palabra de Dios que l bendicen?)

Además, también existe la circuncisión de orgullo por lo que podemos caminar en humildad que reconoce a Dios como la fuente de todo lo que necesitamos y nunca podríamos lograr sin su ayuda porque el orgullo hace que una persona se exalte a sí mismo por encima de Dios (Isaías 14:12-17) y como hemos aprendido en otras enseñanzas que el orgullo tiene sus raíces en el miedo y nos puede llevar a seguir los deseos de nuestra carne que por consiguiente nos puede llevar al mal comportamiento como lo que se describe en Gálatas 5:19-21, que dice, "¹⁹ Ahora bien, las obras de la carne son evidentes, las cuales son: inmoralidad, impureza, sensualidad, ²⁰ idolatría, hechicería, enemistades, pleitos, celos, enojos, rivalidades, disensiones, herejías, ²¹ envidias, borracheras, orgías y cosas semejantes, contra las cuales les advierto, como ya se lo he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios” NBLH

Después de que hemos aceptado a Cristo como Señor y Salvador de nuestras vidas, entramos en un proceso de preparación o lavado de todas estas cosas que no demuestran que Cristo vive en nosotros y es demostrado a través de buen fruto que demuestra que estamos madurando en el camino del amor, de alegría, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad, mansedumbre y autocontrol (Gálatas 5:22-23). Esto es lo que nos ayuda a influir a otros para que también ellos aprendan a vivir la vida en abundancia que Jesús murió para darles y permanecer en ella. Entonces sabremos que vivimos por el espíritu de Dios porque hemos puesto nuestra fe en Cristo Jesús y podemos esperar ansiosamente la manifestación de sus promesas a través de la fe que se expresa en el amor (a él como nuestro único Dios y la única fuente de todo lo que necesitamos y a los demás al mostrarles amor, respeto y honor) Gálatas 5:5-6. (El énfasis es mío). A El solo sea toda la gloria.